Sucedió en vacaciones de Semana Santa


En plenas vacaciones de Semana Santa, Pedro un hombre cincuentón se da el gusto y compra el Porsche que tanto le gustaba. Al tomar la autopista acelera y sonríe con satisfacción, pero al instante, vio las luces azules de la guardia civil de tráfico siguiéndolo.

“No hay forma de que me alcancen con este coche” (pensó), y aceleró a fondo.

Inmediatamente, se dio cuenta del lío en el que se estaba metiendo y paró a un lado de la autopista.

El guardia civil se acerca, no dice nada, coje el permiso de conducir, lo mira muy despacio, da una vuelta alrededor del coche y dice finalmente:

- Mire amigo; ha sido un día muy pesado, es Sábado, Semana Santa, llevo 6 días sin descansar, y estoy a punto de terminar mi turno de patrulla. No tengo ganas de ningún papeleo, así que, si me da una excusa por su exceso de velocidad que no haya oído nunca, le dejo ir de aquí ahora mismo….

El hombre lo piensa unos segundos y responde:

- La semana pasada mi esposa se fugó de casa con un guardia civil. Tenía miedo de que fuera usted y estuviera intentando devolvérmela.

- Que tenga una buena Semana Santa amigo.

Comentarios

  1. Anduvo rapido de reflejos. Muy bueno.
    Un abrazo.

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  2. Jajajajajajajaja típico chiste de perder de vista
    a la mujer, pero qué gracioso que es, por favor XD

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  3. Capazorros, y tan rapido que fué jejeje.
    Gracias por pasarte.

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  4. Lunhe, me alegra que lo encuentres gracioso ;)

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